sábado, 23 de abril de 2011

HAGAS LO QUE HAGAS, LA VIDA ES UN MISTERIO

La mente tiene problemas para aceptar la idea de que hay cosas inexplicables. La mente tiene un gran deseo de explicarlo todo... y si no lo explica, ¡al menos de justificarlo! Todo lo que es un enigma, una paradoja, sigue causando preocupación en la mente.

La historia de la filosofía, de la religión, de la ciencia, de las matemáticas, tienen el mismo origen, la misma mente... el mismo prurito. Tú puedes pensar de una manera y otra persona de otra... pero tienes que comprender el prurito. El prurito es la creencia de que la existencia no es un misterio. La mente sólo está cómoda cuando se desmitifica la existencia.

Hay teólogos que creen que Dios es una realidad. Dios es sólo una idea. Si los caballos tuviesen ideas, su Dios sería un caballo. Puedes estar absolutamente seguro de que no será un hombre, porque el hombre ha sido tan cruel con los caballos que sólo le pueden concebir como el demonio, y no como Dios. Pero, todos los animales tienen su propio concepto de Dios, del mismo modo que la raza humana tiene su concepto de Dios.

Cuando la vida es misteriosa y encuentras huecos que no puedes rellenar con la realidad, los sustituyes por conceptos. Rellenas esos huecos con conceptos; empiezas a sentirte satisfecho porque por lo menos entiendes la vida.

Pero no es posible. Hagas lo que hagas, la vida es un misterio y seguirá siendo un misterio.

En todas partes hay un más allá. Estamos rodeados por el más allá. Ese más allá es Dios; tienes que penetrar en el más allá. Está dentro, está fuera, siempre está ahí. Pero si te olvidas de que existe... esto es lo que solemos hacer normalmente, porque es incómodo mirar al más allá, es embarazoso. Es como mirar un abismo, empiezas a temblar, te sientes mal. Basta con ser consciente de que hay un abismo para que empieces a sentir miedo. Nadie mira al abismo; miramos en otras direcciones, evitamos la realidad. La realidad es como un abismo, porque la realidad es un gran vacío. Es un vasto cielo sin límites. Buda dice: estate abierto al más allá. No te pongas límites, rebasa los límites. Pon límites si los necesitas, pero recuerda que tienes que traspasarlos. No fabriques prisiones.

Creamos muchos tipos de prisiones: las relaciones, las creencias, la religión, todos ellos son prisiones. Te sientes cómodo porque no sopla viento fuerte. Te sientes protegido, aunque la protección sea falsa, porque llegará la muerte y te llevará al más allá. Antes de que llegue la muerte y te lleve al más allá, vete por tu propio pie.

No hay comentarios:

Buscar este blog